(Panamá, 10 - sept - 2008)
Tengo un montón de problemas en Panamá. El primero es que cuando fui a las islas de San Blas en el Caribe, apenas cupe en la avioneta, casi que llegué a pensar que era un avión teleridigido lo que nos iba a transportar (adjunto foto). La primera vez que llegué al aeropuerto del Porvenir, iba yo tranquilemente andando por la isla buscando el check in, cuando me llamó la atención rápidamente uno de los guardas de seguridad del aeropuerto (con taparrabos, arco y flecha): ¡Apártese, señor, que va a aterrizar el avión!.
Pero para llegar al caribe también se puede ir en coche, y como le pasa a De la Cuadra Salcedo, hay que atravesar de vez en cuando algún río.
En fin, una vez te dejan en Isla Pelikano (por ejemplo),el cayuco que te desembarca desaparece. Así que te quedas aislado completamente, o bien puedes ir nadando de isla en isla hasta el continente. Indescriptible la vuelta el lunes a las 4 AM, en un cayuco de madera, lloviendo de noche, y calándose el motor de vez en cuando.
En Isla Perro, se hundió un barco y ahora está colonizado por coral y pececitos de todos los colores. Es bastante chulo meterse por entre el barco con las gafas de bucear y el tubito (para hacer Snorkel, que mola más que decir tubito para respirar). A todo el mundo le gustó la excursión, menos a Natalia, una paraguaya que está harta de que todo sea "Guay del Paraguay", y de "¿Para qué?...Paraguayo".
Los panameños son lo que se ha solido conocer toda la vida como unos completos "agilipollaos perdidos", o como se dice por aquí "ahuevaos". No me quejo, que conste, de que conduzcan mal, no sepan hacer la O con un canuto, no piensen, sean vagos, o que escriban "Zanches", en lugar de Sánchez. ¡No!, no me refiero a eso. Eso me parece hasta perdonable. Lo que tiene delito es cuando -a pesar de su completa ineptitud- se ponen en plan solemne, para disimular, y no se dan cuenta de las "huevasones" que están soltando. Por ejemplo: En la ventanilla para conseguir vuelo a Honduras, dice el tipo de la aerolínea: "Le puedo ofrecer, señor, un billete salida de Panamá el sábado a las 23:50 h, con vuelta desde Honduras para el domingo a las 6:10 AM. 1100 dólares" MUY BIEN, MUY BIEN, SÍ, SEÑOR!!
Claro, la ilusión de mi vida ha sido siempre irme a Honduras a dormir 3 horas en el aeropuerto y volverme.
Tengo un montón de problemas en Panamá. El primero es que cuando fui a las islas de San Blas en el Caribe, apenas cupe en la avioneta, casi que llegué a pensar que era un avión teleridigido lo que nos iba a transportar (adjunto foto). La primera vez que llegué al aeropuerto del Porvenir, iba yo tranquilemente andando por la isla buscando el check in, cuando me llamó la atención rápidamente uno de los guardas de seguridad del aeropuerto (con taparrabos, arco y flecha): ¡Apártese, señor, que va a aterrizar el avión!.
Pero para llegar al caribe también se puede ir en coche, y como le pasa a De la Cuadra Salcedo, hay que atravesar de vez en cuando algún río.
En fin, una vez te dejan en Isla Pelikano (por ejemplo),el cayuco que te desembarca desaparece. Así que te quedas aislado completamente, o bien puedes ir nadando de isla en isla hasta el continente. Indescriptible la vuelta el lunes a las 4 AM, en un cayuco de madera, lloviendo de noche, y calándose el motor de vez en cuando.
En Isla Perro, se hundió un barco y ahora está colonizado por coral y pececitos de todos los colores. Es bastante chulo meterse por entre el barco con las gafas de bucear y el tubito (para hacer Snorkel, que mola más que decir tubito para respirar). A todo el mundo le gustó la excursión, menos a Natalia, una paraguaya que está harta de que todo sea "Guay del Paraguay", y de "¿Para qué?...Paraguayo".
Los panameños son lo que se ha solido conocer toda la vida como unos completos "agilipollaos perdidos", o como se dice por aquí "ahuevaos". No me quejo, que conste, de que conduzcan mal, no sepan hacer la O con un canuto, no piensen, sean vagos, o que escriban "Zanches", en lugar de Sánchez. ¡No!, no me refiero a eso. Eso me parece hasta perdonable. Lo que tiene delito es cuando -a pesar de su completa ineptitud- se ponen en plan solemne, para disimular, y no se dan cuenta de las "huevasones" que están soltando. Por ejemplo: En la ventanilla para conseguir vuelo a Honduras, dice el tipo de la aerolínea: "Le puedo ofrecer, señor, un billete salida de Panamá el sábado a las 23:50 h, con vuelta desde Honduras para el domingo a las 6:10 AM. 1100 dólares" MUY BIEN, MUY BIEN, SÍ, SEÑOR!!
Claro, la ilusión de mi vida ha sido siempre irme a Honduras a dormir 3 horas en el aeropuerto y volverme.
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